¿Cómo te mirarían tus compañeros de trabajo si un día apareces con zapatos naranjas, pantalones negros y polo verde geo por la oficina?
¿O si en una boda te plantas con una chaqueta amarilla flúor y pantalón fucsia?
Sin embargo, si en la salida de una carrera llevas, pongamos por caso, unas zapatillas de tres colores, calcetines negros, unas mallas moradas, camiseta del club roja y mochila azul, a nadie le parece extraño.
Es más, si te fijas en la próxima a la que vayas, verás que es lo habitual.
Y es que el mundo del trail posiblemente sea el más permisivo en cuanto a combinaciones de colores.
Vale todo. Absolutamente todo.
Y es curioso, porque hay marcas que apuestan por la sobriedad en sus prendas y otras que tiran por todo lo contrario.
Y visto lo visto, todas tienen su espacio.
Sería muy difícil, por no decir imposible, identificar una moda clara entre los corredores de trail en cuanto a estilismo se refiere.
Somos la anarquía coloril.
El caos cromático.
Mola.
Y si hay una marca que represente esta variedad de colores y combinaciones en su máxima expresión, esa es sin duda Våga.
Para quien no la conozca, decir que es una marca de gorras y cintas que se caracteriza por unos diseños que algunos definirían como molones, otros flipantes y otros fuera de control.
Por poner algún ejemplo, puedes encontrar desde una discreta gorra azul marino, negro, rosa y amarillo neón, hasta una con estampado negro, verde caqui y azul claro.
Ole y ole.
Y ojo, que son unas gorras de calidad muy top y súper cómodas para correr por el monte.
Sólo que a sus diseñadores les gusta, digamos, exprimir los límites del mundo del color.
¿Y sabéis qué? Que nos encanta.